Friday 4 June 2010

Los límites de la responsabilidad en los servidores públicos

No vamos a permitir opinar sobre la responsabilidad de los servidores públicos en el marco del merecidamente controvertido caso de la guardería ABC. No pretendemos abordar el tema desde el punto de vista de la ley de responsabilidades administrativas de los servidores públicos, ni desde el punto de vista de la eventual comisión de un delito, sino desde el punto de vista general en el que cada quien es responsable de sus acciones y omisiones.

En el momento del lamentable acontecimiento en la guardería ABC, Molinar Horcasitas era el titular del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Pero siendo, o no, el titular, el IMSS emplea a miles de servidores públicos que diariamente toman decisiones en el ámbito de sus respectivas atribuciones. Los miles de servidores públicos del IMSS actúan respondiendo a dos "motores".El primero de ellos es el propio, es decir, la capacidad del servidor público de identificar, analizar y resolver un asunto, en el marco de sus atribuciones, sin influencia del superior jerárquico. El segundo de ellos es el que corresponde al superior jerárquico, en el que existe la comúnmente denominada "línea" el superior jerárquico para que un servidor público resuelva asuntos conforme a lo dispuesto por ese motor.

La existencia de "línea" no representa necesariamente algo ilegal. Pueden existir dos o tres formas de resolver el mismo asunto conforme a derecho, dentro de las cuales el superior jerárquico instruye a su subordinado a seguir una de esas opciones. Cuando esto sucede, los dos servidores públicos cumplen con su deber de apegarse a la norma, por lo que no podríamos hablar de una responsabilidad por haber violado la ley.

Sin embargo, puede darse el caso en el que un servidor público resuelve un asunto sin apegarse a la norma. Si el servidor público actuó con el "motor" propio, es decir, no respondió a una "línea" específica del superior jerárquico. Consideramos que no hay acción u omisión del superior jerárquico por la que se le pueda atribuir responsabilidad alguna. De otra forma, el solo hecho de que un servidor público de una dependencia o entidad actúe contra la norma haría responsable al titular de la misma de todo lo que los empleados de la institución, no del titular de la entidad, realicen.

Por otra parte, puede darse el caso de que un servidor público resuelva un asunto respondiendo a la "línea" proporcionada por su superior jerárquico, la cual no se apega a la norma. En ese caso, tanto peca el que mata a la vaca como el que le agarra la pata. Son responsables, tanto el superior jerárquico que dio "línea", como el servidor público que la ejecutó. Pero una máxima constitucional es lo que complica la cosa: la presunción de inocencia. Se presume inocente una persona hasta que se demuestre lo contrario. ¿Cómo vamos a demostrar que hubo "línea"? Difícilmente existe constancia e la "línea", usualmente no hay oficios o e-mails que sustenten que hubo una instrucción superior.

En todo caso, la instrucción superior no exime de responsabilidad al inferior jerárquico. Siempre hay quien hizo o dejó de hacer; quien ejecutó la decisión propia o la instrucción superior. De cualquier forma nadie, hasta donde sabemos, ha sido sancionado por el acontecimiento.

En el fondo Dansevise con Lars H.U.G.

Wednesday 2 June 2010

El empleo en México

Hoy se publicó la columna de Carlos Loret de Mola en la página de internet de El Universal, diario de circulación nacional en México. En esa columna se analizan las cifras que recientemente se han publicado sobre el empleo. Carlos contrasta la cifra de 382 mil empleos creados este año, la cual anunció el presidente de la república, contra los apenas 47 mil 894 que informó el INEGI. La pregunta central de Carlos alrededor de este problema es: ¿Quién dice la verdad?

Loret argumenta que la cifra de 382 mil empleos está basada en cifras del Seguro Social, lo cual deja fuera alrededor de 32 millones de mexicanos que laboran sin esa prestación. Mi primera pregunta es ¿en qué parte del comparativo se ubican los 32 millones que no están en el Seguro Social? No lo sé.

Asimismo, como reflexión también valdría la pena considerar que si asumiéramos que sólo se crearon 47 mil 894 empleos, quiere decir que la diferencia entre la cifra del presidente y la del INEGI, es decir, los otros 334 mil 106 empleos que se registraron en el Seguro Social ya existían; SÓLO se formalizaron.

Nosotros nos atreveríamos a decir, simplemente, que existe una incongruencia entre la cifras del ejecutivo federal y las del INEGI. Diferencia que merece una explicación. No me atrevería a contrastar la verdad con la mentira. Al final de su columna, Loret se pronuncia a favor de la cifra del INEGI, lo cual significa que, conforme a lo cuestionado inicialmente por Carlos, el presidente no está diciendo la verdad, es decir, está mintiendo. Mentir significa manifestar lo contrario a lo que se sabe, cree o piensa. En otras palabras, Loret establece que el titular del ejecutivo federal sabe, cree o piensa que la cifra correcta es la del INEGI, pero aún así manifiesta lo contrario.

En nuestra perspectiva, es preciso establecer que hay una incongruencia entre cifras que debe ser aclarada, ya sea por el INEGI, en su carácter de órgano público con autonomía técnica y de gestión, o por titular del Ejecutivo Federal.

En el fondo Weapon of Choice con Fatboy Slim.

Monday 24 May 2010

Mexico @ Wembley

I watched the Mexico v. England match with lots of frustration. I understand these preparation matches are designed for coaches to test their players and the composition of their teams, but I assume that, just as any other sports, both teams are expecting to beat their rival. Am I right?

As a spectator, I really hate the people saying we shouldn't care about the result because this is just a friendly match, but why? Beyond the physical endurance and precision of the players, don't they need also to set their minds in the wining mood? How does a player get used to win when they have rehearsed under the 'we do not care about the result mind set'?

I can easily imagine Guille Franco (one of Mexico's forwards, not strikers, this game) in front of the goal with no decision to score because nothing is going to happen if he fails. Or, does it? Will Aguirre send him to the bench next game? Will people stop buying products bearing the name of that player because he is not good? I do not care about all that. The only thing I care, as a spectator, and as a Mexican, is that I want my team playing to win, testing or not, rehearsing or not, but to win. Soccer is the most popular sport in Mexico, thousands of millions of dollars are put in that basket every year, and we yet do not play to win?

The Indian from Kashmir is playing as I finnish writing this.